27 oct 2016

Fantasmas

Son entes de noche, son miedos con nombre, mayúscula en vida y minúscula en muerte. Se esconden al alba, con tus quehaceres, si pretendes dormir, obvia a los menores. Esperan tranquilos, detrás de los muebles con ganas de sustos, con ganas de verte. Si los ves no te tapes, no quieren herirte, si no piensas en ellos se hacen mayores. Pero no recordar que existen no debes, si temes su grito, su seguridad crece. A veces en sueños nos dicen qué quieren, parar a escucharles también lo merecen. Si ignoras el hecho de que sin querer aparecen, aparecen más tarde, más oscuros, más fuertes. Creer sus palabras es tu decisión, a menor atención, menos solución. Inventamos a los fantasmas como simples espejismos, como símiles de lo más profundo que hay en nosotros mismos.